lunes, 28 de marzo de 2011

Odio el cambio de hora

Me da igual que sea para dormir una hora mas o una menos. Las dos modalidades me rompen totalmente el ritmo y por eso no me gustan.

También me da absolutamente igual lo que digan o dejen de decir sobre el ahorro energético. Y conste que no es que me de igual le hecho de ahorrar. Es que no me creo las cifras que dan ni me creo que el supuesto ahorro sea tal. Principalmente porque nadie compara ese supuesto ahorro con el evidente perjuicio que nos hace a todos.

De vez en cuando, cuando nos toca andar reajustando los relojes, me acuerdo de un personaje muy interesante y un poquito excéntrico -es la mejor forma de definirlo que se me ocurre- que conocí hace tiempo, catedrático de matemáticas, que decía que a él no le afectaban los cambios horarios. El se regía siempre por la hora solar.

No hay comentarios: